Hace casi un año me resultó sorprendente haber sido incluido como una celebridad en vipfaq.com; la verdad, alejado como he estado del mundo editorial durante todo este tiempo, no tenía conciencia de que algo así pudiera ocurrir. Idéntica sensación he tenido hace unos días cuando contactó conmigo la redacción de MundiFrases.com proponiéndome realizar una selección de frases mías, y más al leer lo siguiente:
«MundiFrases.com ofrece una forma alternativa de descubrir la personalidad y el pensamiento de los grandes. Antiguos y contemporáneos. No biografías, sino un compendio de su pensamiento, inmortalizado en las frases que han atravesado la historia convirtiéndose en célebres».
Lo cierto es que, a raíz de ello, he curioseado un poquillo en Google y he encontrado que también estoy incluido en sitios como Hoy en la Historia —en la sección de cumpleaños de famosos (1977)— o Efemérides 2.0 —en el apartado de nacimientos del 29 de diciembre—. En fin, supongo que algo está pasando...
¿Subidón de ego? No os creáis. Con el tiempo, llegas a comprender lo difícil que es en literatura alcanzar notoriedad, por mínima que sea, y más si el autor no es una figura mediática o no está respaldado por grandes grupos editoriales. Sabiendo lo que sé hoy día, cosas como estas no dejan de sorprenderme. Y me alegran, pero no por lo que puedan suponer para mí como escritor, sino al saber que mis obras siguen leyéndose y continúan su camino con total independencia de mí. Supongo que cuando se dice que un libro, en el momento que se publica, deja de pertenecer a su creador y pasa a ser de los lectores, es por esto mismo. Celebro que así sea.
